*El investigador del CICESE dictó videoconferencia como parte del ciclo de
divulgación científica “Las Ciencias del Mar desde casa”, que organizó la Facultad de Ciencias Marinas de la Universidad de Colima.
Los problemas que ocasionan los Florecimientos Algales Nocivos (FAN), dijo el
investigador del Centro de Investigación Científica y Educación Superior de Ensenada
(CICESE), Ernesto García Mendoza, son mecánicos porque lesionan o bien obstruyen
las branquias de los peces; biológicos, porque degradan el medioambiente y afectan a
otros organismos al reducir las concentraciones de oxígeno en los cuerpos de agua, y
químicos, ya que producen toxinas neurotóxicas, hemolíticas y diarreicas.
Sobre este tema de gran importancia para los estados costeros, el oceanólogo
Ernesto García dictó la videoconferencia “Florecimientos Algales Nocivos en México,
causas y consecuencias”, como parte del ciclo de charlas de divulgación científica “Las
Ciencias del Mar desde casa”, que organizó la Facultad de Ciencias Marinas de la
Universidad de Colima, campus Manzanillo.
Este tipo de florecimientos, conocidos como mareas rojas (aunque no todas las
mareas son rojas, explicó), son un fenómeno natural que se caracteriza por una
acumulación de biomasa algal que tiene un impacto negativo sobre la salud pública,
sobre organismos o actividades económicas.
Ellos, junto con científicos de la Universidad de Colima y de otras instituciones
educativas del país, estudian el fenómeno para determinar qué los causa y proponer
entonces formas efectivas de mitigarlos o prevenirlos.
Explicó, primero, que las algas son diferentes especies y que pertenecen a once
divisiones. En general, dijo, “son organismos que hacen fotosíntesis, pero tienen una
división tisular o de tejidos menor a las plantas vasculares, pero bioquímicamente
similares; estos organismos siempre van a existir donde haya humedad. Entre ellos, se
pueden encontrar diferencias en su tamaño, como macroalgas y microalgas”.
En cuanto a las causas que originan los FAN, comentó que “pueden ser naturales
y culturales, al inducir cambios en el aporte de nutrientes por disponibilidad o alteración
en la composición de nutrientes, afectando la respuesta algal y derivando de esa manera
en un incremento en su biomasa, lo que da como resultado un efecto nocivo”.
Sobre las afectaciones, destacó los síndromes de intoxicación por consumo de
mariscos en humanos, que pueden ser paralizantes, amnésicos y diarreicos. Una especie,
la Gymnodimuim catenatum, explicó, produce saxitoxina, que es considerada una de las
sustancias químicas más potentes que puede afectar a los seres humanos y a diversos
organismos, pues ataca los reflejos respiratorios provocando muerte por asfixia.
Entre los impactos socioeconómicos, el experto dijo que afectan gravemente la
economía costera, ya que cuando la acumulación de toxinas excede la norma de salud,
se han tenido que implementar vedas sanitarias, como el caso del 2015, cuando la veda
de la llamada Almeja Generosa, en San felipe, duró 295 días.
Comentó también que otro evento importante con pérdidas millonarias debido a
la toxicidad de los FAN, fue el registrado en 2016 en la bahía de Todos Santos, enfrente
de Ensenada, en la que hubo una gran mortandad de atún por sofocación branquial.
En eventos más recientes, dijo que en 2018 se registró en Tabasco la muerte de
más de 100 manatíes asociada a la presencia de algas tóxicas, y a principios de este año
murió una gran cantidad de tortugas en Oaxaca por la ingesta de algas productoras de
saxitocina.
El especialista dijo que los FAN, muchos de los cuales se deben a la actividad
humana, sobre todo en aguas interiores, no oceánicas, afectan la salud y la economía,
principalmente en zonas costeras. Lo importante en estos caso, aseguró, es tratar de
predecir o anticipar dónde podría darse un Florecimiento Algal Nocivo y principalmente
tener un monitoreo constante y enfocado a cada región, porque las especies que generan
toxinas varían de un lugar a otro.
Por último, aseguró, “para mitigar los efectos negativos de los FAN se necesita
generar y aplicar el conocimiento en diferentes áreas de investigación, así como integrar
aspectos económicos y sociales que permitan implementar un esquema de atención
adecuada de estos fenómenos”.