La Secretaría de Salud del Gobierno del Estado indicó que en la temporada de calor se incrementa el riesgo de que la comida sea susceptible al desarrollo microbiano y, por tanto, a la descomposición, lo que aumenta la probabilidad de contraer enfermedades gastrointestinales.
La Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coespris) reiteró que la contaminación de los alimentos se presenta en gran medida por la manipulación higiénica inadecuada de los mismos, tanto por los preparadores como por los consumidores.
Por ello, recomendó extremar los cuidados al momento de cocinar y almacenar los alimentos, llevando a cabo las buenas prácticas higiénicas en su preparación, es decir, manipularlos con las manos y utensilios limpios y desinfectados.
Se debe evitar toser o estornudar sobre los alimentos; asegurarse que las materias primas estén desinfectadas y confirmar que hayan sido correctamente almacenadas, así como procurar que los alimentos listos para consumirse, como salsas preparadas, ensaladas de verduras, de frutas o con mayonesa, sopas frías y sushis, entre otros, no permanezcan a temperatura ambiente por más de dos horas.
Además, hay que revisar que la fecha de caducidad no haya expirado y cerciorarse que los alimentos que necesiten estar en refrigeración se encuentren a una temperatura adecuada para retrasar el proceso de descomposición.
En el caso de adquirir alimentos en establecimientos, aconsejó revisar que las instalaciones se encuentren en buenas condiciones de higiene y limpieza y que el personal que atiende use indumentaria limpia y actúe con buenas prácticas higiénicas, así como evitar el consumo de alimentos y bebidas preparadas de dudosa calidad sanitaria en la vía pública.
La Coespris mencionó que durante todo el año se realizan acciones de capacitación al personal del ramo alimenticio en la entidad, con lo cual se refuerzan las medidas de prevención de cualquier riesgo que represente a la salud de los colimenses por el consumo de alimentos mal procesados.