A cuatro años del atentado del que fue objeto, y al presentar por primera vez a las personas que la acompañaban ese 26 de julio de 2019 a bordo de la camioneta que los transportaba, la presidenta de Manzanillo, Griselda Martínez aseguró que la razón de ese ataque fue simplemente por hacer su trabajo a favor del municipio y su gente.
Hace poco más de un año, dijo, aconteció un nuevo atentado en su contra, al estar estacionadas las camionetas donde se transporta ella y sus escoltas, fueron baleadas la madrugada del 29 de junio de 2022, hechos que sucedieron a un costado de la presidencia municipal, “esa gente lo hizo desde el cerro, por donde también huyó”.
La noche del miércoles y a través de una transmisión en vivo, la alcaldesa presentó a Daniel Hernández y a César Hernández, quienes el día del atentado iban con ella como integrantes de la dirección de Comunicación Social, pues habían estado en un evento de fin de cursos de verano en el centro de la ciudad y se dirigían a otro a las instalaciones de la feria pues sostendría una reunión con los comités vecinales de la ciudad; acto al que ya no pudieron llegar, pues casi al subir el puente del Barrio 4, dos motocicletas con 2 personas a bordo cada una, intentaron cometer su asesinato.
En su relato, explicó la forma en que sus dos escoltas, uno adscrito a la dirección de Seguridad Pública y el otro a la Secretaría de Marina (conductor y copiloto), trataron de repeler el ataque y las indicaciones de protección que dieron durante la ráfaga de balas que impactaban la camioneta.
Griselda Martínez, se calificó como buena persona, como gente de bien, que viene de una familia tradicional y modesta, de bisabuelos que formaron parte de la fundación de lo que hoy es el puerto más importante de México; con años de lucha para tener un mejor país y un mejor lugar para vivir, “no buscamos un cargo para enriquecernos, sino para trabajar a favor de la gente, para combatir la corrupción, para hacer las cosas bien; por ello dimos de baja a policías ligados al narco, por ello impedimos la instalación de empresas que dañarían el medio ambiente, por eso también presentamos denuncias por las irregularidades encontradas de los anteriores gobiernos”.
La alcaldesa, relató su sentir, después de 4 años de sufrir un atentado que vino a cambiarle su vida de manera estrepitosa y el cual, sigue impune; “tuve que vivir un año en las instalaciones de la Secretaría de Marina; luego más de 1 año en la presidencia municipal; se acabaron las fiestas, vivir en mi casa, salir con mi familia, ir al cine, a comprar ropa, no puedo hacerlo, porque ahora, y por instrucciones de la federación, para mi protección personal tengo que salir con un gran grupo de escoltas”.
“Ese día, nos llevaron de inmediato a las instalaciones de Seguridad pública, y cuando me tomarían mi declaración, una nueva ráfaga de balas de armas de fuego impactaron esas instalaciones, en ese tiempo, no, había una barda, eran rejas. Me tuvieron que sacar de ahí rodeada de elementos de seguridad, y con un chaleco antibalas puesto, era tan pesado, tan frío, ahí me di cuenta que nada sería igual”, puntualizó la alcaldesa.
Uno de los momentos más emotivos de su transmisión en vivo, fue cuando relató su llegada al Hospital Naval, en donde, tras recibir una bala en la mandíbula, su escolta integrante de la SEMAR sería operado; “ahí vi a su esposa y a sus hijas, la señora me preguntó que, yo, cómo estaba, que él (escolta), estaba bien y se recuperaría; ahí me sentí muy mal, pues me cuestioné, ¿qué hubiera pasado si él hubiera muerto? Qué haría la señora, sus hijas tan pequeñas y bonitas”.
En la voz, sus acompañantes de ese día, hace 4 años, coincidieron que ha sido un episodio fuerte en su historia de vida, y que a la distancia genera miedo, pero a la vez orgullosos de formar parte de un proceso en donde por primera vez, Manzanillo vive una verdadera transformación.
Por su parte Daniel Hernández, compartió el “momento cero” de hace 4 años, pues cuando se dieron cuenta que estaban balaceando la camioneta, él sentado en medio de la parte de atrás, se aventó al suelo, quedando prácticamente debajo del asiento del conductor, “me sorprendió la tranquilidad de la presidenta en ese momento de angustia, nos decía, -tranquilos, tranquilos, tranquilos. En ningún momento pensé que íbamos a morir ese día, sólo que iba a pasar. Tenía 11 días de haber llegado a trabajar a Comunicación Social del Ayuntamiento de Manzanillo”.
A su vez, César Hernández, quien, derivado de ese atentado, escribió el libro “El día que quisieron oscurecer la esperanza”, mencionó que ese momento ha marcado su vida, pero que también ha servido de motivación y de firmeza para seguir colaborando con un gobierno que ha marcado la diferencia en beneficio de todas y de todos, “el libro lo iba a escribir, sería biográfico de la presidenta, y con este hecho lo nutrí para que quedase asentado en la historia del municipio”.
Griselda Martínez, insistió que seguirá trabajando como hasta ahora; de forma honesta, eficiente y siempre ponderando el bienestar de las y los manzanillenses; e incluso incluyó hasta sus agresores y sus familias, “todos merecemos un mejor lugar para vivir. Gracias por creer en nosotros y ayudarnos, nunca los vamos a traicionar, nunca diremos una cosa y haremos otra. Y a los que no nos quieren, que se aguanten”.
Manzanillo, Col., a 27 de julio de 2023.